La idea de un mundo preadámico, es decir, una existencia y civilización antes de Adán, no es una enseñanza explícitamente abordada en la Biblia. Sin embargo, algunos teólogos y estudiosos han especulado sobre esta posibilidad basándose en interpretaciones particulares de ciertos pasajes bíblicos. Aquí están algunos puntos clave sobre esta teoría y su relación con la Biblia:
Argumentos a Favor del Mundo Preadámico

1. Génesis 1:1-2: Algunos sugieren que hay un lapso de tiempo indeterminado entre Génesis 1:1 (“En el principio creó Dios los cielos y la tierra”) y Génesis 1:2 (“Y la tierra estaba desordenada y vacía”). Esta interpretación, conocida como la “teoría de la brecha”, postula que hubo una creación inicial que fue destruida y que la creación descrita en los días posteriores es una recreación o restauración.
2. Isaías 14 y Ezequiel 28: Estos pasajes describen la caída de Lucifer (Satanás) y algunos teólogos sugieren que esta rebelión angelical pudo haber ocurrido en un mundo anterior al de Adán. Sin embargo, estos textos son mayormente interpretados como referencias simbólicas al orgullo y caída de reyes humanos (Rey de Babilonia y Rey de Tiro) y, por extensión, a la caída de Satanás.
3. Jeremías 4:23-26: Algunos interpretan este pasaje, que describe una tierra desordenada y vacía, como una referencia a una destrucción previa de la tierra, diferente del juicio de Dios en los tiempos de Noé. No obstante, esta interpretación es minoritaria y el contexto sugiere que se trata de una visión profética del juicio sobre Judá.

Argumentos en Contra del Mundo Preadámico

1. Creación en Seis Días: La narrativa de Génesis 1 presenta la creación del mundo en seis días, culminando con la creación del hombre (Adán y Eva) en el sexto día. La mayoría de las interpretaciones tradicionales no dejan espacio para una civilización anterior a esta.
2. Adán como Primer Hombre: El Nuevo Testamento presenta a Adán como el primer hombre, cuya desobediencia introdujo el pecado y la muerte en el mundo (Romanos 5:12-14, 1 Corintios 15:22). Este argumento refuerza la idea de que no hubo una humanidad antes de Adán.
3. Silencio Bíblico: La Biblia no menciona explícitamente un mundo preadámico, y la doctrina cristiana tradicional no lo considera una parte central de la fe. La falta de referencias claras y directas en la Escritura hace que esta teoría sea especulativa.

Conclusión
La idea de un mundo preadámico es una especulación teológica y no una doctrina establecida en la Biblia. Aunque algunos pasajes pueden ser interpretados de manera que sugieran esta posibilidad, la interpretación mayoritaria de la tradición judeocristiana no apoya la existencia de una civilización antes de Adán. La narrativa bíblica presenta a Adán y Eva como los primeros seres humanos creados por Dios y la introducción del pecado a través de su desobediencia como el punto de partida para la historia de la redención.